Para que se entienda: Este tema gira en torno a los gases, flatulencias, cardos y p2 (peos).
Dice un refranero muy popular: Los gases no se aguantan. Sin embargo, hay lugares y lugares para soltarlos. Una persona muy educada, se revienta antes de soltarlo en cualquier lugar, pero uno que no tenga compasión, le viene bien un bosque que una guagua repleta.
Hay diferentes tipos de gases (p2). Unos más olorosos o escandalosos que otros. Me decía un socio en el politécnico que no hay mejor ¨cardo¨ que el silencioso, es más mortífero y perdura más en el olfato nasal. Claro, también depende de lo que uno coma. Por ejemplo, él era adicto al pan con aceite y ajo y hasta la col hervida. Una vez, en el aula, soltó un uranio empobrecido que todo el mundo tuvo que salir a escape (4 se quedaron trabados en la puerta). Y el muy cerdo, ahí sentado, decía que estaba disfrutando el aroma. ¡Que peste!
Géneros: En la emisión de gases (y no de efecto invernadero), los hombres se llevan la voz cantante. Más desinhibidos, menos preocupados y más descarados. Las mujeres son más recatadas en este aspecto. Es muy raro oír que alguna suelte un ¨cardo¨ involuntario. No se cómo lo hacen.
Sonidos: Desde un leve pssss, hasta una corneta con sordina o un estruendo. Algunos son tan escandalosos que posiblemente le digan al que se lo tiró: ¨Si le pones 2 dedos, chifla¨. Algunos tratan de desvirtuarte: ¡Tremendo resbalón! ¡Esta suela está en candela! ¡So, caballo!
A uno le decíamos Thor, porque lo que soltaba eran puros truenos. Y el ahi, muy normal.
En fin. Cuentos hay muchos. Pero dime tu experiencia al respecto. A ver si alguna mujer se anima también a contar algún secreto… que le haya pasado a otra mujer.
¿Se animan?
Dice un refranero muy popular: Los gases no se aguantan. Sin embargo, hay lugares y lugares para soltarlos. Una persona muy educada, se revienta antes de soltarlo en cualquier lugar, pero uno que no tenga compasión, le viene bien un bosque que una guagua repleta.
Hay diferentes tipos de gases (p2). Unos más olorosos o escandalosos que otros. Me decía un socio en el politécnico que no hay mejor ¨cardo¨ que el silencioso, es más mortífero y perdura más en el olfato nasal. Claro, también depende de lo que uno coma. Por ejemplo, él era adicto al pan con aceite y ajo y hasta la col hervida. Una vez, en el aula, soltó un uranio empobrecido que todo el mundo tuvo que salir a escape (4 se quedaron trabados en la puerta). Y el muy cerdo, ahí sentado, decía que estaba disfrutando el aroma. ¡Que peste!
Géneros: En la emisión de gases (y no de efecto invernadero), los hombres se llevan la voz cantante. Más desinhibidos, menos preocupados y más descarados. Las mujeres son más recatadas en este aspecto. Es muy raro oír que alguna suelte un ¨cardo¨ involuntario. No se cómo lo hacen.
Sonidos: Desde un leve pssss, hasta una corneta con sordina o un estruendo. Algunos son tan escandalosos que posiblemente le digan al que se lo tiró: ¨Si le pones 2 dedos, chifla¨. Algunos tratan de desvirtuarte: ¡Tremendo resbalón! ¡Esta suela está en candela! ¡So, caballo!
A uno le decíamos Thor, porque lo que soltaba eran puros truenos. Y el ahi, muy normal.
En fin. Cuentos hay muchos. Pero dime tu experiencia al respecto. A ver si alguna mujer se anima también a contar algún secreto… que le haya pasado a otra mujer.
¿Se animan?
